Moldearuina 2
Moldearuina 3
Blitzer Troll Terrible
Bombardero Troll Terrible
Peleador Troll Terrible
Mulg 1
******
HOARLUK MOLDEARUINA, CHAMÁN DE LOS NUDOS
El legendario chamán dhuniano Hoarluk Moldearuina lleva explorando la faz de Caen más de cien años. Pocos ancianos son tan vigorosos y tan irreprimibles. Hoarluk está fascinado y obsesionado con el poder místico de la sangre que conecta a todas las razas de trolls, y cree que la sangre de troll es superior a la sustancia diluida que fluye por las venas de las demás razas. Este desdén, junto con el hecho de que su especie cada vez esté más en declive, alimentan su resentimiento hacia la humanidad. Los forasteros han traspasado las tierras trollkins, incluyendo a los otrora seguros Nudos. Hoarluk ha pasado toda su vida envalentonando a los trollkins de los Nudos para ponerlos en contra de estos intrusos y pretende contraatacarles en venganza. El tiempo de la guerra ya ha llegado.
Muy pocos están dispuestos a hablar en contra de Moldearuina. El poderoso chamán es propenso a sufrir arrebatos temperamentales y a realizar acusaciones mordaces contra aquellos a los que considera que son idiotas. Hoarluk ha desafiado a duelo a incontables ancianos y nunca ha sido derrotado, humillando cruelmente a aquellos que cayeron bajo su bastón. Muchos consideran que está loco, pero hasta sus detractores están de acuerdo en que Dhunia le ha elegido y, por lo tanto, procuran evitar atraer su ira.
A través del esfuerzo y la fuerza de voluntad Moldearuina ha ganado un poder sin igual sobre los trolls de pura raza. Tiene fuertes lazos con todas las especies de troll, las cuales le escuchan como si fuese uno de los suyos. Al llevar piedras de sangre que los trolls consideran sagradas ha reforzado los antiguos pactos entre sus especies. Hoarluk se ganó ser inmortalizado en las leyendas de su gente cuando entró desarmado en el bosque y volvió con varios trolls terribles a su lado. Esas bestias no habían atendido las órdenes de los suyos desde los tiempos de los Molgur y la noticia del logro de Hoarluk se extendió por todas las tribus. Ahora, los trolls terribles están entre las mayores armas de los desesperados trollkins.
Moldearuina pasa gran parte de su tiempo viajando de un kriel a otro, reuniendo reclutas y organizando ataques contra los humanos o cualquier especie lo bastante tonta como para saquear los Nudos. Ha obliterado, por lo menos, dos campamentos madereros que empezaron a adentrarse más allá de los árboles marcados, y masacró a no menos de tres tribus de bogrins que intentaron establecerse cerca de su hogar. Este tipo de actos le ponen en contra a trollkins más moderados como el jefe Pielférrea del Bosque del Espino. Aunque Horluk no sea jefe tiene una influencia tremenda sobre las tribus de los Nudos, el bastión de la tradición trollkin más poderoso que queda. Ningún jefe de los Nudos se atreve a ignorar sus palabras.
Moldearuina ha pasado décadas recuperando piedraskriels perdidas y descifrando runas antiguas. Carga con el peso de sus ancestros sobre sus hombros, ya que es allí donde lleva numerosos pergaminos en los que está transcrita la sabiduría de su pueblo. El conocimiento que ha ganado el chamán le ha permitido acceder a habilidades encerradas dentro de sí mismo que nunca habían sido usadas anteriormente.
Los trolls son el furioso instrumento elegido por Dhunia. Para Moldearuina, cada batalla es un apocalipsis, como si la salvación de todos los sangretrolls dependiera del resultado. Sea cual sea la razón que le mueva, que Moldearuina haya salido de los bosques de los Nudos es un presagio funesto para todos aquellos que hayan atraído la ira del trollkin.
******
HOARLUK MOLDEARUINA, LA RABIA DE DHUNIA
Hoarluk Moldearuina pasó un siglo reuniendo fuerzas e indagando en los misterios más profundos de la esencia de los sangretrolls. Su gran poder ha sacudido los cimientos de las comunidades de los Nudos y del Bosque del Espino, y se ha ganado a regañadientes el miedo y el respeto de incontables ancianos. Los trollkins de muchos círculos hablan de Hoarluk como si fuera una fuerza de la naturaleza: implacable, incomprensible e imposible de ignorar. Es una criatura a la que es mejor apaciguar y aplacar antes que persuadir. Aquellos que le temen creen que ha alcanzado el culmen de su poder y que un chamán con esa edad ya no puede aprender más. Pronto descubrirán lo equivocados que están.
A pesar de que muchos trollkins temperamentales siguen juntándose alrededor de Moldearuina para oír su violenta retórica y luchar a su lado, él sigue estando centrado en una meta más profunda. Ser un simple chamán de guerra nunca le ha parecido suficiente. Quiere ahondar en la conexión fundamental entre todas las especies de trolls: el poder que Dhunia les otorgó con su sangre. Tras aprender todo lo posible de los pergaminos recogidos de las piedraskriels más antiguas y aventurarse en todas las ruinas importantes de los Molgur, Hoarluk decidió tomar un enfoque más directo. Se sumergiría en las profundidades de la conciencia de los trolls terribles.
Liberando su mente y echando a un lado todas las convenciones, Moldearuina se unió a las más violentas y poderosas de esas criaturas: corría con ellas, vivía como una de ellas y acabó alcanzando un estatus cuasi-divino entre ellas. Ha descubierto reservas de poder que eran desconocidas para los chamanes, y esta energía ha sido puesta a prueba en un ritual presenciado por los trolls terribles más ancianos. En el punto álgido de la ceremonia, Hoarluk se cortó una mano y la regeneró, consiguiendo en segundos lo que a cualquier otro trollkin le habría llevado meses.
Liberando su mente y echando a un lado todas las convenciones, Moldearuina se unió a las más violentas y poderosas de esas criaturas: corría con ellas, vivía como una de ellas y acabó alcanzando un estatus cuasi-divino entre ellas. Ha descubierto reservas de poder que eran desconocidas para los chamanes, y esta energía ha sido puesta a prueba en un ritual presenciado por los trolls terribles más ancianos. En el punto álgido de la ceremonia, Hoarluk se cortó una mano y la regeneró, consiguiendo en segundos lo que a cualquier otro trollkin le habría llevado meses.
Moldearuina no solo ha desbloqueado unos poderes regenerativos sin precedentes, sino que también ha conseguido entender mejor la naturaleza primigenia que vincula a las bestias de guerra con los brujos. Este conocimiento le ha dado una influencia inigualable sobre sus enemigos, ya que ahora puede afectar a bestias que no sean sangretrolls, robar su esencia y usar sus poderes para sus propios designios. Su recién descubierto dominio sobre el saber natural rivaliza hasta con el de los druidas del Círculo Orboros.
Hoarluk estaba tan concentrado en estos poderes que no previó la traición que casi acabó con todos sus esfuerzos. Hace varios años, una conspiración de ancianos de los Nudos y del Bosque del Espino le traicionó a las autoridades cygnarianas. La consiguiente captura y encarcelamiento de Moldearuina le terminaron de convencer de que era necesario contraatacar con una furia y violencia irresistibles contra aquellos que se oponen a los kriels, y también de dirigir represalias contra aquellos ancianos que le vendieron. La influencia del poderoso chamán sobre las bandas más belicosas de los Nudos salió reforzada, y aquellos que ya le temían pronto se dieron cuenta de que aún no habían visto el terror de toda su furia desatada.
******
HOARLUK MOLDEARUINA, PROFETA TERRIBLE
Hoarluk Moldearuina se ha convertido, tanto en palabras como en obras, en un pilar esencial de los Kriels Unidos. Mediante su exploración de la historia y la sangre de los trolls ha desenterrado secretos olvidados desde hace mucho. Su voluntad indomable arrancó leyendas de las piedraskriels del pasado y las trajo rugiendo hasta el presente, hambrientas y llenas de rabia. Sus predicciones más terribles se han convertido en verdades. Muchos de los que le rehuían por sus ideas radicales ahora le suplican ayuda. Y, aunque sus palabras son una provocación a la guerra, el chamán lo sacrificaría todo para asegurar la supervivencia de su pueblo.
Moldearuina se ha convertido en un depositario viviente de conocimientos, rivalizando incluso con los omnipotentes del Círculo Orboros. A lo largo de toda una vida de búsquedas ha registrado todos los lugares sagrados, y ha pasado incontables horas recogiendo grabados de las piedraskriels de todo el oeste de Immoren, acumulando una gran cantidad de enseñanzas ancestrales. Al final, hasta el portar con él siquiera una selección limitada de las escrituras espirituales más potentes se ha convertido en una carga imposible de llevar. Unos cuantos fornidos trolls pigmeos se han presentado como voluntarios para ayudar a llevar los fardos del legendario chamán. Aquellos que han aceptado esta tarea cargan suficientes pergaminos y estuches como para igualar en peso al equipamiento llevado por los mejores equipados guerreros de los kriels.
La profunda comunión entre Moldearuina y los trolls más grandes es más que una cuestión de sabiduría, ya que ha cambiado el propio ser del chamán. Cuando hizo un pacto con Mulg el antiguo al dar su propia mano como ofrenda, Moldearuina aprendió a regenerarse de la misma manera en que lo hacen los trolls. Ha aprendido a extender este tremendo poder regenerativo a los trolls que están a sus órdenes, volviéndoles increíblemente tenaces.
La profunda comunión entre Moldearuina y los trolls más grandes es más que una cuestión de sabiduría, ya que ha cambiado el propio ser del chamán. Cuando hizo un pacto con Mulg el antiguo al dar su propia mano como ofrenda, Moldearuina aprendió a regenerarse de la misma manera en que lo hacen los trolls. Ha aprendido a extender este tremendo poder regenerativo a los trolls que están a sus órdenes, volviéndoles increíblemente tenaces.
El Chamán de los Nudos nunca ha dejado de buscar nuevas y mejores armas que añadir a su arsenal, y de demostrar la existencia de criaturas incluso más grandes que los trolls terribles. A través de sus pergaminos recuperó leyendas que datan de los inicios del mundo, cuando las montañas caminaban y la tierra del cuerpo de Dhunia se mezcló con la sangre de la Sierpe depredadora para dar a luz a los progenitores de todas las especies de trolls. Encontró señales antiguas que especificaban dónde estaban encarcelados los reyes trolls. Desoyendo las advertencias dejadas por sus ancestros, los despertó y los liberó. Apenas un poco después viajó al helado norte y encontró a sus primos invernales, los reyes del glaciar. Al hacerlo, Moldearuina soltó a unos seres tan peligrosos como temibles, pero sabe que solo unas medidas tan extremas pueden revertir los horrores infligidos a su pueblo.
Mientras que los demás lideres de los kriels intentan sacar el mejor partido a lo que tienen, Moldearuina no acepta retiradas ni compromisos contraproducentes. Sus éxitos a la hora de localizar a los reyes trolls avivó su deseo de despertar de su sopor a más de ellos y de encontrar otras formas de llevar el dolor y la destrucción a sus enemigos. Un millar de gritos de terror no son suficientes ni siquiera para empezar a nivelar la balanza, y Moldearuina está listo para desatar toda una avalancha de matanzas.
******
MULG EL ANTIGUO
Los trolls terribles se aprovechan de sus capacidades regenerativas para conseguir una longevidad extraordinaria. Muchos de ellos viven siglos y se vuelven más peligrosos y tenaces con la edad. Con la reputación de ser el troll terrible más antiguo y feroz que jamás haya pisado Caen, Mulg es el parangón de esa reputación. De hecho, es lo bastante viejo como para haber visto a los Orgoth con sus propios ojos. Ha deambulado por las tierras salvajes de las montañas meridionales como si fuera un rey troll arrugado, demandando pleitesía a todos los demás trolls que se cruzaban en su camino. Incluso los trolls terribles más jóvenes y agresivos se retiran mansamente cuando los pesados pasos de Mulg se acercan a sus dominios, dejando muertos a su paso para aplacar su hambre infinita.
Mulg solo había interactuado de forma limitada con los trollkins antes de bajar por primera vez de sus montañas, hace siglos, para exigir tributo. Envidioso de sus sellos de poder, demandó que en la piel pedregosa de su espalda se le tallaran runas que describiesen sus muchas y grandes hazañas, así como su larga historia. Mulg puede concentrar su rabia primordial sobre estas runas para reprimir el poder que las bestias enemigas lancen contra él.
Hoarluk Moldearuina fue el primero en darse cuenta de la presencia continuada de la antigua criatura en las fábulas de unos kriels cygnarianos localizados a larga distancia los unos de los otros. Las diferentes leyendas describían a un troll tremendo, un "trozo de montaña que camina". Obsesionado, Moldearuina convirtió la búsqueda de Mulg en algo personal, y lo estuvo persiguiendo sin resultados durante años. Entonces, en el 603 AR, mientras se abría paso por una de las áreas más profundas y remotas de las montañas Wyrmwall, el chamán empezó a ser seguido sin darse cuenta por otros trolls de pura sangre que querían ver como le recibiría Mulg.
Hoarluk Moldearuina fue el primero en darse cuenta de la presencia continuada de la antigua criatura en las fábulas de unos kriels cygnarianos localizados a larga distancia los unos de los otros. Las diferentes leyendas describían a un troll tremendo, un "trozo de montaña que camina". Obsesionado, Moldearuina convirtió la búsqueda de Mulg en algo personal, y lo estuvo persiguiendo sin resultados durante años. Entonces, en el 603 AR, mientras se abría paso por una de las áreas más profundas y remotas de las montañas Wyrmwall, el chamán empezó a ser seguido sin darse cuenta por otros trolls de pura sangre que querían ver como le recibiría Mulg.
Cuando Moldearuina por fin se presentó, se reunieron cerca de Mulg. El pequeño y encorvado trollkin sorprendió a los presentes invocando la ceremonia de saludo tradicional de los trolls terribles. Realizó un despliegue de agresividad e invitó a Mulg a que le diese un puñetazo en el pecho. Consintiendo, Mulg aplastó con su puño el torso de Moldearuina, haciendo pedazos su tronco y mandándole por los aires a través de todo el claro. Hoarluk yació como muerto hasta que consiguió reunir suficiente poder como para curar su cuerpo apaleado y levantarse. Aunque tosía sangre cada vez que respiraba, seguía hablando al gran troll con respeto.
Ninguna otra criatura había sobrevivido antes a un golpe como ese, y el antiguo estaba tan impresionado que nombró al chamán "Krol". Ambos compartieron su sangre en una ceremonia primitiva y, desde entonces, Mulg ha considerado a Krol su hermano pequeño. El significado exacto del nombre es discutible pero la traducción más probable es "no comida". Esto representa un concepto profundamente abstracto para los trolls terribles, ya que tienen inclinación por comerse casi todo. Mulg impartió tanto respeto hacia Hoarluk Moldearuina a través de esta bendición que el chamán se ganó la obediencia sin precedentes de todos los demás trolls terribles.
Durante la mayor parte de su larga vida Mulg se mantuvo apartado de las guerras de los trollkins, contento con merodear por sus montañas en busca de comida. El hambre le corroe constantemente, incluso cuando está lleno. Pero cuando Moldearuina fue capturado y encarcelado por los cygnarianos el troll sintió la llamada de su vínculo sanguíneo con Krol y oyó la voz del chamán dentro de su mente. Una oleada de rabia abrumó el antiguo cerebro de Mulg y marchó para liberar a Krol al frente de una cruzada en busca de sangre, llevándose con él una selección de trolls terribles jóvenes y ansiosos y dejando la prisión en ruinas. Desde entonces, Mulg raramente se ha alejado de Moldearuina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario