MONOGRÁFICO: EL AQUELARRE

El Aquelarre 1

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EL AQUELARRE DE BRUJAS DE GARLGHAST

Las brujas de Garlghast fueron descubiertas en el verano del 593 AR por el bajel pirata cryxiano Aldibraxis. Respondiendo a una señal de fuego proviniente de un tramo de playa desolado, la tripulación encontró a tres chicas de no más de trece años que tenían un artefacto misterioso y ominoso: una esfera flotante hecha de sombras y hierro ennegrecido. Las jóvenes se presentaron como Helleana, Morgaen y Selene. Con sus mentes confusas por el contacto mágico de las tres extrañas chicas, los marineros les dieron la bienvenida a bordo y, sin hacer preguntas, pusieron rumbo a Aguanegra.

La tripulación dejó a las hermanas a solas ya que les daba miedo la terrible reliquia que viajaba con ellas. Lo que más inquietaba a los marineros no era la manera en la que la esfera con pinchos (llamada el Egregore) parecía devorar la luz, ni la forma en la que las sombras recorrían su superficie agujereada, sino que las hermanas le susurraban con ternura.

Cuando el Adibraxis echó el ancla las hermanas se dirigieron hacia el Templo negro de Toruk en Skell e, insolentemente, solicitaron audiencia con el lord liche Terminus. El Lord liche aceptó, intrigado por su audacia. Las hermanas le llamaron "Conquistador", "Devastador de hombres" y "Lord de los mares plagados". Declararon que habían llegado en el momento indicado para ver cómo se cumplía el auténtico destino de Cryx. Impresionado por su convicción y sintiendo el poder del artefacto al que estaban vinculadas, el Lord liche puso a prueba sus visiones proféticas para descubrir que tenían verdadero talento para los augurios. Las vinculó al servicio eterno a lord Toruk.

Más adelante, cuando Terminus dirigió a sus fuerzas en la conquista de la tierra firme, pidió al aquelarre que se les uniera. Pronto descubrió lo útiles que resultaban ser las tres hermanas, ya que le ayudaron varias veces a superar las amenazas provenientes tanto de los ejércitos mortales como de las fuerzas de sus rivales cryxianos. De no ser por el Aquelarre de brujas, puede que Asphyxious hubiese conseguido desterrar permanentemente a Terminus a las tierras salvajes de Urcaen cuando se enfrentaron en la Batalla de Garrodh.

Las brujas de Garlghast, en muchas de las misiones que han cumplido para su maestro, han devastado asentamientos de todos los reinos de Immoren occidental. Algunas comunidades pequeñas y aisladas no solo han sido derrotadas, sino que han sido completamente borradas de la existencia: los pozos fueron envenenados, los edificios, quemados hasta los cimientos, y las cenizas fruto de la destrucción, enterradas. Los refuerzos encontraron a los aldeanos empalados en estacas o colgados de los árboles, pidiendo aún con sus gemidos la liberación de la muerte. A veces, con estas tácticas, las brujas han ganado batallas antes de que se diese el primer golpe.

Su compañero constante, el misterioso Egregore, extiende su poder mágico, les permite acumular su poder arcano y dirigir a sus helljacks a través de grandes distancias. Es un dispositivo sombrío de hierro cubierto de runas del que chorrean zarcillos de oscuridad que caen sobre el aquelarre, las rodean y se mueven como si tuvieran consciencia propia. Provenga de Morrdh, de los orgoth o de cualquier otra fuente oscura, los orígenes del Egregore son desconocidos.

Las hermanas y el Egregore comparten un vínculo extraño, aunque innegable. Los pensamientos de una son conocidos por todas. Comparten su esencia vital y se susurran continuamente entre sí en idiomas desconocidos. Es raro que las brujas se separen y sus poderes están vinculados a su estrecha relación. Envueltas por la oscuridad y rodeadas por vientos cortantes, su poder alcanza su verdadero punto álgido cuando las hermanas rodean de forma ritual al Egregore y crean una conjunción perfecta.

Las brujas de Garlghast son unas manipuladoras temibles. Controlan sus fuerzas a distancia y desatan torrentes de poder arcano asesino que devastan a los enemigos que se les oponen. Estas poderosas ocultistas dirigen al mundo hacia un futuro sombrío que solo ellas pueden percibir en su totalidad. Su visión oscura es una nueva plaga sobre Immoren occidental. En los días venideros, esta plaga en marcha se convertirá en un sudario de oscuridad que ninguna luz puede atravesar.